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Mujeres y música
en la esfera privada

En esta sala presentamos el papel de las mujeres en la práctica musical del siglo XIX en Colombia, caracterizada por estar restringida al ámbito privado y familiar. Con el fin de ilustrar el tema, aquí se exponen las condiciones en las que las mujeres jóvenes participaban de la interpretación musical en los salones bogotanos, usando el ejemplo concreto del Álbum de música de Ana y Cristina Echeverría. Los textos grabados son apartes de escritos sobre la educación e interpretación musical femenina de la época, que nos dan luces sobre la forma en que se desarrollaba esta actividad y, al mismo tiempo, sobre sus implicaciones sociales en la construcción de la realidad femenina. 

Who Are We
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Música y matrimonio

(…) las señoritas bogotanas se presentan en el gran salón ante lo mas lucido de Bogotá a recibir por medio de la música un nuevo lauro debido a sus talentos y cultura musical , y recorriendo sus tímidos dedos de nieve sobre el alvo marfil o ya dándonos con sus dulcísimos y delicados sopranos una idea de lo que fueron las inmortales  Billingtons y Malibranchs.”

Haz click aquí para escuchar el fragmento
El Día, febrero 7 de 1847, pág. 4.
Voz: Natalia Bohórquez. Grabación y mezcla: Natalia Bohórquez
Las señoritas bogotanas
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Repertorio para señoritas

“Estas criaturas comienzan con mucha formalidad. Sus padres les ponen un maestro que gana uno o dos fuertes por cada lección. Comienzan a aprender su teoría y a tocar escalas y ejercicios; pero a los dos o tres meses, cansadas de mover los dedos inútilmente, dicen al maestro en tono suplicatorio: —“póngame una piececita que suene sabroso, aunque sea un valsecito.”

Haz click aquí para escuchar el fragmento
Caicedo Rojas, “Estado actual de la música en Bogotá”,
El Semanario, 1886, 42

Voz: Natalia Bohórquez. Grabación y mezcla: Natalia Bohórquez
Estas criaturas
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Señoritas en los salones colombianos

A UNA VIEJA

Pianista de pacotilla,

Cantatriz sin vocación, 

Como objeto de irrisión

Es usté una maravilla,

Digna de exposición.

Haz click aquí para escuchar el poema
de Gonzalo Vidal, publicado en La miscelánea en 1895
Voz: Juana Monsalve. Grabación y mezcla: Natalia Bohórquez
 
A una Vieja

Las señoritas que hacían música eran una parte importante del paisaje sonoro de los espacios privados de la nueva burguesía urbana que se estaba asentando en las principales ciudades colombianas. Sin embargo, las habilidades técnicas que estas intérpretes mostraban eran dispares, y por ello, podían recibir afectuosos y sentidos halagos o ser objeto de burla.

Rosa Echeverría 

Las obras para piano de la compositora samaria Rosa Echeverría presentes en este álbum, se presentan como una gran excepción para la época, ya que, durante este tiempo, la composición se erigía como una actividad puramente masculina, pues se consideraba que el genio compositivo no era compatible con el ideal inocente y puro de la mujer decimonónica.

Rosa era prima de Ana y Cristina, y varias de sus piezas están dedicadas a ellas, pero la información disponible sobre la compositora es muy escasa. Estas obras estaban destinadas para su interpretación solo en la esfera privada, ya que las señoritas de buena reputación no figuraban en la vida pública.

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"Las Dos Patrias"
"Niños Desamparados"
"Los Mártires"
"La Rosa Linda"
"La Gratitud"
Intérprete: Manuela Osorno. Ingeniería de grabación y mezcla: Noelia Rego y Daniel Eduardo Rodríguez Castellanos.
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Mujeres en la sombra

A pesar de pertenecer a una familia prestante de la sociedad capitalina colombiana, la información sobre Ana y Cristina Echeverría es casi inexistente, lo cual nos dice mucho sobre el rol de las mujeres en el siglo XIX en Colombia. Sobre León Echeverría, su padre, hay bastante información, pero sus hijas no son mencionadas ni siquiera en los obituarios de la muerte de su padre. Las mujeres estaban confinadas a la esfera privada y no era bien visto que figuraran públicamente, por lo que todo su despliegue creativo e intelectual sucedía a puerta cerrada. Este es también el caso de Rosa Echeverría, que claramente tenía talento para la composición, pero solo pudo aspirar a componer obras pequeñas para piano, con el fin de ser interpretadas por su círculo femenino más cercano.

“El ejercicio de las artes, como la música, el baile, el canto, es mui agradable modo de emplear el tiempo, siempre que no se dé a estas ocupaciones una atención preferente    i exclusiva; porque una madre de familia, por lo común, no puede ser artista, i porque debe hacerse una distinción entre lo que es indispensable saber, i lo que es únicamente agradable”.

Haz click aquí para escuchar el fragmento
Josefa Acevedo de Gómez, Tratado sobre economía doméstica, 1869, 11
Voz: Juana Monsalve. Grabación y mezcla: Natalia Bohórquez
El ejercicio de las artes
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Manuales de urbanidad

Canciones del álbum

En el álbum de Ana y Cristina encontramos, además de repertorio para piano, dos canciones a dos voces. El texto de la canción anónima a dos voces “La Cocinera”, nos recuerda los roles establecidos en las relaciones de pareja en un mundo heteropatriarcal. Los pensamientos que se exteriorizan en esta canción no son compatibles con la noción de decoro de la época, claramente expuesta en los manuales de urbanidad, según los cuales la mujer debía ser discreta y aprender a callar; pero al mismo tiempo, es una muestra de “sabiduría popular”.

La Cocinera
Himno del niño al despertar
Intérprete: Manuela Osorno. Ingeniería de grabación y mezcla: Noelia Rego y Daniel Eduardo Rodríguez Castellanos. Valentina Sánchez, primera voz; Juana Monsalve, segunda voz.
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Redes femeninas

“Terminada la comida volvimos a la sala donde rogamos a las señoritas según el nuevo estilo muy bien introducido, y que es de reciente fecha, que tocaran el piano. Varias se sucedieron, y en casi todas hallamos ejecución, sensibilidad y buen gusto. 'Vea Ud.', decía yo a mi amigo D. Tiburcio, 'que inmensa diferencia en este ramo de la educación del bello sexo entre lo presente y 1803 !'. Entonces no llegaban a cuatro los forte-pianos que había en Santafé; y hoi son más de ciento cincuenta: entonces pasaba por una maestra la que ejecutara un adajio, o un andante, y hoi ha oido U. como una cosa fácil y ordinaria, trozos de las más difíciles composiciones europeas; [...] Es lástima que no hayan hecho los mismos progresos en el canto; a escepción de dos o tres. no pueden los buenos oídos sufrir a casi todas las demás. Pero la culpa no es de nuestras señoritas sino de los maestros: hasta ahora no les han enseñado otra cosa que tonos monótonos de canto de iglesia”.

Haz click aquí para escuchar el fragmento
Variedades: Bogotá entre 1803 y 1843 (III)", El Día, 25 de febrero, 1844, pág. 2.
Voz: Juana Monsalve. Grabación y mezcla: Natalia Bohórquez
Terminada la comida

Fuentes

 

Afanador, María Isabel y Báez, Juan Fernando. 2015. “Manuales de urbanidad en la Colombia del siglo XIX: Modernidad, pedagogía y cuerpo”. Historia y Memoria, n.º 11 (julio-diciembre): 57-82.

Duque, Ellie Anne. 1996. “La sociedad filarmónica o la vida musical en Bogotá hacia mediados del siglo XIX”. Ensayos: Historia y Teoría del Arte, n.º 3 (julio):75-92. https://revistas.unal.edu.co/index.php/ensayo/article/view/46482.

Head, Matthew. “If the pretty little hand won’t stretch” en Sovereign Feminine: Music and Gender in Eighteenth-Century Germany. Oakland: University of California Press, 2013.

Narvaja de Arnoux, Elvira. 2017. “Los manuales de retórica y los de urbanidad del siglo XIX: El control de las emociones como marca de distinción”. RÉTOR 7 (2): 110-134.

Velásquez, Juan Fernando. “El encanto de las damas: Las mujeres y la práctica musical a finales del siglo XIX en Medellín, Colombia” en Mujeres en la música en Colombia. El género de los géneros, ed. Carmen Millán de Benavides y Alejandra Quintana Martínez, 141-159. Bogotá: Editorial Pontificia Universidad Javeriana, 2012.

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